TEXTO POÉTICO
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La técnica que he usado para mi texto poético es el encadenamiento, ya que, me parece una técnica fácil, con la que se te pueden ocurrir miles de ideas. Además te permite realizar un poema de lo más absurdo y que a la vez sea precioso. Si me pidieran definirme con una palabra, elegiría absurda, así que creo que esta técnica me define a la perfección y me encanta poder plasmar lo que soy.
Es un texto dirigido a niños desde primer ciclo de infantil, ya que creo que es un texto con un lenguaje y un tema adecuado con el que los niños pueden desarrollar su imaginación.

ENCADENAMIENTO. Encadenar frases es de lo más sencillo: la segunda comienza con la palabra con la que terminó la primera. Encadenar versos es igual de sencillo si entendéis por verso una oración acabada en punto. Y recordad: hay que olvidarse de la rima.

Iba a ser la boda de mi tía Lola.
Lola tiene el pelo de colores.

Colores tienen sus estampados.

¡Estampados que son muy divertidos!

Divertidos eran sus zapatos.

Zapatos diferentes llevaba uno en cada pie.

Pie que pertenece a mi tía Lola.

Lola es graciosa y guapísima.

Guapísima iba a ir a su boda.

Boda que llevaba preparando dos días por lo menos.

Por lo menos la boda es mañana.

Mañana será el gran día.

El día que se casa mi tía Lola.

TEXTO DRAMÁTICO


La dramatización es un recurso fundamental y inexcusable que desarrolla una gran cantidad de capacidades en el niño. Pero a veces nos resulta difícil encontrar textos que puedan ser representados por los niños de nuestra clase (bien por el número de personajes, bien por la dificultad de algunos papeles...) En este caso, lo mejor es crear obritas personalizadas para el grupo. En unas ocasiones lo hará el maestro; en otros, la trabajarán los niños.

A la hora de idear el argumento, pueden utilizarse los mismos recursos que para la prosa; cualquiera de las estrategias presentadas es válida.

Seguidamente, se elabora un elenco de personajes y se reestructura la historia para convertirla en diálogos. Del mismo modo que en la creación de cuentos, los alumnos pueden participar a la hora de idear el hilo argumental.

 Otra forma de elaborar una obra dramática es la del “juego de rol”. En este caso, cada niño dice quién quiere ser y cómo quiere ser. Con todos los personajes, se inventa la historia y los niños van añadiendo aspectos argumentales a partir de su propia actuación improvisada. Con todos los datos, se elabora el texto.

 Para imaginar historias dramáticas pueden utilizarse las mismas estrategias incluidas en la creación en prosa.

Mi texto dramático está dirigido a niños de segundo ciclo de infantil aunque también podría estar dirigido a niños desde primer ciclo, Ya que es una historia de fantasía donde los niños pueden empatizar con el personaje principal y sentirse más cercanos a la historia. Está redactada con un vocabulario y una sintaxis sencilla por la que pueden entender la historia a la perfección.

Escaleras hacia abajo.

NARRADOR: En un día como otro cualquiera, Marta y su familia se mudaron a una nueva casa. Se trataba de un chalé blanco con tejado de tejas rojas y una enredadera trepando por el lateral. En esa casa comienza la historia…

MADRE DE MARTA: ¡A cenar!

PADRE DE MARTA: ¡Ya voy!

MARTA: ¡Voy!

NARRADOR: Marta comienza a bajar las escaleras desde su cuarto, pero cuando pisa el último escalón lo que debería de ser el salón se convirtió en un bosque.

MARTA: Pero… ¿cómo…? (dice girando la cabeza de un lado a otro observando el paisaje).

NARRADOR: De repente aparecieron dos ardillitas parlanchinas, llamadas Tomy y Samy, que empezaron a hablar con Marta.

SAMY: ¿Cómo te llamas pequeña?

TOMY: Eso, ¿cómo te llamas?

SAMY: ¡Ya se lo he dicho yo!

NARRADOR: Marta asombrada y un poco asustada responde…

MARTA: Marta… pero no se donde estoy, quiero volver a mi casa…

LAS ARDILLAS: ¡Nosotros te ayudaremos!

NARRADOR: Comenzaron a andar por el bosque cuando se encontraron a una hormiguita llorando.

MARTA: ¿Qué te pasa hormiguita?

HORMIGUITA: He perdido el rastro de mi colonia y no sé dónde ir

NARRADOR: Marta en ese momento se puso en el lugar de la hormiguita miro a su alrededor, y vio un hormiguero.

MARTA: ¡Lo encontré! ¡no temas hormiguita, yo te llevaré con tu familia!

NARRADOR: Marta llevo a la hormiguita hacia el hormiguero y se sintió muy contenta por haberla ayudado.

HORMIGUITA: ¡Muchas gracias Marta!

NARRADOR: Era hora de seguir el camino, las ardillas llevaron a Marta a unas escaleras que estaban dentro del bosque. Eran unas escaleras viejas y de madera; pero cuando comenzó a bajar las escaleras de repente se volvieron de oro reluciente con unos escalones de marfil blanco. En el último escalón Marta vio el salón entonces se giro y miro a las ardillas.

MARTA: ¡Adiós ardillas, muchas gracias por la ayuda!

ARDILLAS: ¡Adiós Marta, vuelve pronto!

NARRADOR: Al final Marta llego a cenar, y cuando llego la hora de dormir solo podía pensar en volver al bosque.

TEXTO NARRATIVO O EN PROSA

Se trata de un texto dirigido a niños desde primer ciclo, ya que a la edad de tres años todavía no hablan muy bien y la historia gira entorno a eso. Una de las protagonistas no habla muy bien, por lo que los niños si ven al narrador de la historia hablando mal (un adulto), les causará una situación cómica. 
He realizado este cuento a través de la narración de una historia que no tiene un fin didáctico, simplemente es un cuento para que los niños imaginen y se diviertan.  

El reino de las mal bien dichas palabras.

Érase una vez en el reino de las mal bien dichas palabras, donde reinaba una niñita de 4 años llamada Inés,  que todo lo que decía estaba bien dicho y nadie la podía corregir, ya que era la reina.

Un día la reina Inés quiso conquistar el reino de las palabras muy bien dichas. Antes de batallar la reina Inés tenía que ir a declarar la guerra al rey Andrés, por lo que se montó en su caballo de juguete y acompañada de un soldado, comenzó su viaje.

Cuando Inés llegó a la corte del reino de las palabras muy bien dichas Inés dijo:

-Rey Andrés, he venguido aquí a dicirte que tu reino de las muy palabras dichas bien ahora es mío.

El rey Andrés le contestó: - ¡Me alegro de verla reina Inés!,  le agradezco su visita, pero no creo que sea conveniente que me declare la guerra. En cualquier caso, primero me gustaría dialogar para ver si llegamos a un acuerdo.

La reina Inés se enfureció mucho porque le irritaba como hablaba, el rey Andrés no paraba de hablar y hablar y ella cada vez se ponía mas roja y más roja… Al final la reina Inés le gritó diciendo…: - ¡que te de claro la jerra!, a continuación, un soldado que le acompañaba llamado Claro le dio un papel en el que ponía: -prepárate… porque te vamos a dar jerra…

Al día siguiente los soldados del reino de las mal bien dichas palabras partieron hacia el reino del rey Andrés, donde ya estaban preparados para el ataque. Los soldados de la reina Inés comenzaron a atacarles con las palabras más mal dichas que existían, y cuando esto sucedió a los sodados del rey Andrés les dolían muchísimo los oídos, pero después, estos contestaban diciéndolas bien, por lo que a los soldados del reino de las mal bien dichas palabras también les dolían los oídos.

Al final después de tanto dolor de oído los reyes Inés y Andrés decidieron llegar a un pacto, y cuando empezaron a hablar el rey se empezó a fijar en el pelo tan rizado y sedoso que tenía la reina Inés, y la reina se comenzó a fijar que el rey Andrés tenía unos ojos de color verde brillante preciosos. Poco a poco se empezaron a juntar y……. colorín colorado este cuento se ha acabado.